martes, 22 de enero de 2008

En la carretera

He hablado alguna vez de las "fantásticas" carreteras en Japón, pero a pesar de que sea un palo tener que conducir por la autopista legalmente a 80 (al final se va a 120...) y por las locales a 50, y de tragarse semáforos en todas las carreteras que no sean autopistas (no sé yo al final si nuestras rotondas son mejores...), incluso allí se ven cosas divertidas...

Este fin de semana de camino a las pistas de esquí, nos topamos con esto! No estoy seguro de para que se usa, pero nos echamos unas buenas risas con ello...












Las señales de tráfico también se las traen, y no estamos tampoco para pararnos a fotografiarlas decentemente, pero las señales tienen, como la mayoría de las cosas en Japón, un toque de dibujos animados (Japoneses claro está). Merecen una mención especial las siguiente señales:

La del muñeco de nieve es de mis favoritas, realmente tenía miedo de encontrarme con un muñeco de nieve al entrar en el túnel...


Para el área de servicio se muestra claramente como el pobre coche está ya cansado para seguir conduciendo (el conductor no parece ser relevante en este caso ... )















La señal de peligro indica como es de costumbre en Japón, el resultado del peligro, no la situación antes del peligro, es decir aparece el coche destrozado, aunque le ponen una nota de humor con una carita y una mueca de pena, quizás para levantar el ánimo en caso de que te estampes y sobrevivas? unos cachondos!!


Para finalizar esta señal también te sugiere tomarte un descanso, o más bien un descanso para tu coche pues se ve claramente que ya no puede más y necesita tomarse un cafetito... ya se sabe que el conductor no se tiene en cuenta!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Els cartells són realment molt bons. Jeje!

un español en Furukawa dijo...

Casi casi podria escriure un blog només pes cartells jeje. N'hi ha per totes bandes. Ja miraré de nar tirant més fotos a nes dois aquests.

Anónimo dijo...

Hola Juanjo.

Soy el que envió el correo hablando de tu blog. Curiosamente, me constestaron algunos destinatarios asegurándome que les sonabas mucho. ¡Y tanto!, el pasado sábado en el fogueró de La Porciúncula estuve hablando con Xisca sobre la visita con tu padre que te van a realizar en Semana Santa.

Viendo tus visicitudes en Japón, solo me resta decirte; paciencia, paciencia y más paciencia.

Y a ver si en los próximos juegos olímpicos de empresas consigues alguna medalla. Que como los lápices, cuadernos y disquetes, tal vez tengas que traértela de casa ;o)

un español en Furukawa dijo...

Hola Alfonso,

si ya me comentaron, parece que eres un acérrimo seguidor del blog, y eso me alegra, significa que mis palabras no se las lleva el viento(bueno quizás alguna que otra parrafada sí...) Parece también que Mallorca no es tan grande como nos pensamos jeje :) saludos.